El pasado año 2022 fue duro para los consumidores debido al aumento en los costes de alimentación y energía. Además, la pérdida de poder adquisitivo ha sido una constante en los últimos doce meses que ha afectado directamente a las compañías.
Teniendo en cuenta la necesidad de motivar a sus plantillas, pero también vigilantes de las cuentas, algunas empresas, especialmente del sector retail, han recurrido a bonus puntuales para no comprometer su viabilidad a futuro.
Josep Capell, socio director de la consultora CEINS, especializada en salarios y retribuciones, indica que «de esta manera los empleados pueden capear la inflación y la empresa no se compromete a un crecimiento de la masa salarial de cara a los próximos ejercicios. Nosotros se lo estamos recomendando a muchos de nuestros clientes para la actual coyuntura».
Por ejemplo, la marca H&M pagará a sus empleados un añadido puntual de 500 euros en la nómina de enero para aquellos que hayan permanecido todo el año en la compañía y 250 para los que hayan estado medio año. Por otro lado, grandes empresas como Iberdrola también han recurrido a esta medida y pagarán 1.000 euros extra a todos los empleados en 2022.