Por qué la tasa de autónomos asturianos disminuyen

Asturias está viviendo un auge empresarial con la creación de medio millar de nuevas empresas cada año. Sin embargo, este crecimiento contrasta con la caída en el número de autónomos afiliados al régimen. ¿Qué está sucediendo en el Principado?

Uno de los sectores que está experimentando un crecimiento significativo es el tecnológico. Además, el sector sanitario, la atención a empresas y la formación también están en alza. En conjunto, estos sectores han dado lugar a más de 1600 nuevas empresas en los últimos cuatro años.

Estos sectores están respondiendo a las demandas del mercado y ofreciendo soluciones innovadoras, lo que les permite mantenerse y crecer. Por ejemplo, las empresas tecnológicas tienen una tasa de supervivencia del 70% después de cinco años, lo que indica su capacidad para adaptarse y prosperar.

Mientras las empresas florecen, el número de autónomos en Asturias sigue en declive, apenas sosteniéndose por encima de los 70.000.

Una de las posibles razones es el trasvase de empleo desde el régimen de autónomos hacia el empleo por cuenta ajena. Específicamente, sectores como la construcción muestran este fenómeno, donde muchos autónomos optan por unirse al mercado laboral tradicional en busca de estabilidad y beneficios.

Patricia Oreña, presidenta de la Asociación de Autónomos de Asturias, tiene una perspectiva diferente. Según ella, desde principios de 2024, Asturias ha perdido 300 autónomos y el desempleo ha aumentado en 180 personas.

Oreña destaca que la presión fiscal y la burocracia están asfixiando a los autónomos. Muchos negocios viables tienen que cerrar debido a estas dificultades administrativas y fiscales, lo que impide que los autónomos prosperen.

A pesar de las diferencias, Patricia Oreña subraya que no se trata de una competencia entre trabajadores por cuenta ajena y autónomos. Ambos tipos de empleo tienen su valor y contribuyen al tejido económico de Asturias. Lo ideal sería que ambos grupos pudieran crecer y prosperar en la región.

La respuesta parece estar en abordar las barreras que enfrentan los autónomos, como la burocracia y la presión fiscal.

Implementar políticas que reduzcan la burocracia y alivien la carga fiscal podría ayudar a los autónomos a mantener sus negocios y fomentar la creación de empleo. Además, ofrecer programas de formación y asesoramiento podría equipar a los autónomos con las herramientas necesarias para superar los desafíos que conlleva la gestión de un negocio propio.

Mientras Asturias celebra el crecimiento de nuevas empresas, es crucial no perder de vista los desafíos que enfrentan los autónomos. Apoyar a ambos sectores es esencial para un crecimiento económico sostenible y equilibrado en la región.

Por Cruz Santillana

Asturiana, apasionada de la tecnología, el emprendimiento y el marketing online. Community manager y redactora en Asturtic.