El presidente del Colegio de Médicos de Asturias, Luis Antuña, ha expresado su preocupación ante la falta de acuerdos políticos y administrativos para llevar a cabo una reforma integral del mapa sanitario en la región. Según Antuña, la ausencia de consenso entre las distintas administraciones pone en riesgo la capacidad del sistema sanitario asturiano para afrontar los retos futuros, especialmente en lo que respecta a la escasez de profesionales médicos y a la distribución de recursos en el territorio.
Desde el Colegio de Médicos advierten que la inacción en este ámbito podría derivar en un colapso asistencial en los próximos años, con una carga de trabajo insostenible para los facultativos y un deterioro en la calidad del servicio para los pacientes.
Déficit de médicos: un problema estructural en Asturias
Uno de los principales desafíos que enfrenta el sistema sanitario asturiano es el déficit progresivo de médicos, una situación que se agrava debido al envejecimiento de la plantilla y la dificultad para atraer y retener nuevos profesionales. Según los datos del Colegio de Médicos, más del 30% de los facultativos en activo alcanzarán la edad de jubilación en la próxima década, lo que dejará vacantes en especialidades críticas sin suficiente relevo generacional.
El proceso de formación de un médico especialista en España es largo y requiere una planificación anticipada. Desde el inicio de la carrera universitaria hasta la finalización del periodo de residencia, pueden transcurrir entre 10 y 12 años antes de que un profesional esté completamente capacitado para ejercer en una especialidad determinada.
“Si no tomamos medidas ahora, dentro de diez años nos encontraremos con una crisis sanitaria sin precedentes. El problema no es solo la falta de médicos, sino la falta de planificación para suplirlos a tiempo”, advirtió Antuña.
Reforma del mapa sanitario: un ajuste necesario a la realidad demográfica
El Colegio de Médicos de Asturias insiste en la urgencia de adaptar el mapa sanitario a la realidad demográfica de la región, garantizando una distribución equitativa de los recursos sanitarios y evitando la saturación de ciertos centros de salud y hospitales.
Actualmente, Asturias enfrenta grandes desigualdades en el acceso a la sanidad según la zona geográfica. Mientras que en las ciudades principales como Oviedo, Gijón o Avilés los hospitales cuentan con infraestructuras más avanzadas y un mayor número de especialistas, en las zonas rurales y en la Asturias central y occidental la escasez de médicos es preocupante.
Algunas de las medidas propuestas por el Colegio de Médicos para solucionar estos problemas incluyen:
- Refuerzo de la Atención Primaria con un mayor número de médicos de familia y pediatras, evitando listas de espera excesivas y consultas saturadas.
- Revisión y redistribución de las plantillas hospitalarias, priorizando las áreas con mayor carga asistencial.
- Incentivos económicos y laborales para atraer médicos a zonas rurales, donde la falta de profesionales es más acusada.
- Planes de formación y fidelización de nuevos médicos, ofreciendo mejores condiciones laborales para evitar la fuga de talento a otras comunidades autónomas o al extranjero.
“La sanidad en Asturias no solo necesita más recursos, sino que estos recursos estén mejor distribuidos y se adapten a las necesidades reales de la población. No podemos mantener un modelo diseñado hace décadas sin introducir mejoras que lo hagan sostenible”, señaló Antuña.
Falta de consenso y lentitud en la toma de decisiones
Uno de los mayores obstáculos para avanzar en la reforma del mapa sanitario es la falta de acuerdos entre las diferentes administraciones. A pesar de que el problema del déficit de médicos y la necesidad de reorganización sanitaria han sido debatidos en numerosas ocasiones, las decisiones clave siguen postergándose, lo que genera una creciente frustración entre los profesionales del sector.
El Colegio de Médicos ha solicitado una mesa de diálogo entre la Consejería de Salud, sindicatos, colegios profesionales y el Gobierno central para definir una estrategia común que permita implementar soluciones a corto, medio y largo plazo.
“Nos enfrentamos a un problema que no puede esperar más. Cada año que pasa sin una reforma estructural nos acerca más a una crisis asistencial en Asturias”, afirmó el presidente del Colegio de Médicos.
Desde la entidad médica insisten en que cualquier reforma debe ir acompañada de un compromiso firme de inversión en sanidad, asegurando que los cambios no solo se queden en el papel, sino que se materialicen en mejoras reales para los profesionales y los pacientes.
Consecuencias de la inacción: ¿qué pasará si no se toman medidas?l servicio de la salud y la biomedicina
Si no se actúa a tiempo, Asturias podría enfrentar graves consecuencias en su sistema sanitario en los próximos años. Algunas de las principales repercusiones serían:
- Mayor presión asistencial sobre los médicos en activo, con turnos más largos y mayor número de pacientes por consulta.
- Incremento de las listas de espera para consultas, pruebas diagnósticas e intervenciones quirúrgicas.
- Dificultad para acceder a especialistas en determinadas zonas de la región, obligando a los pacientes a desplazarse a otras comunidades para recibir atención médica.
- Fuga de profesionales sanitarios a otras regiones con mejores condiciones laborales.
- Deterioro en la calidad asistencial, afectando a la seguridad y el bienestar de los pacientes.
El reto de la sanidad asturiana en los próximos años no será solo el de aumentar la inversión en recursos humanos y materiales, sino también el de diseñar un sistema eficiente y equitativo, capaz de anticiparse a los desafíos del futuro en lugar de reaccionar cuando ya sea demasiado tarde.
El debate sobre la reforma del mapa sanitario sigue abierto, pero el Colegio de Médicos de Asturias insiste en que el tiempo para actuar se está agotando.